lunes, 20 de agosto de 2012

El sistema de calefacción tradicional de El Toboso

Casa tradicional de El Toboso, con la puerta de la gloria al fondo

A pesar de que creíamos que nos habíamos situado en una época de progreso sin retorno, la incertumbre se ha instalado entre nosotros con visos de permanencia. A veces conocer el pasado puede hacernos reflexionar sobre el presente .  En El Toboso y en La Mancha hasta hace pocos años la forma tradicional de calentar las casas -aparte del hogar de leña evidentemente- era por medio de las llamadas "glorias", un sistema de calefacción -ya conocido por los romanos con el nombre de hipocaustum- que permitía a través de pequeños túneles llevar el calor proporcionado por la combustión de sarmientos y ceporros por gran parte de la casa. El sistema se componía de una puerta de entrada -de chapa-  para la leña, que también permitía sacar la ceniza sobrante, de un túnel y todo concluía en una chimenea. También existía un cierre del tiro de la chimenea para resguardar el calor, una vez terminada la combustión. . Las glorias se generalizaron en los años sesenta y setenta del siglo pasado coincidiendo con la gran cantidad de leña proporcionada por la extraordinaria extensión del viñedo. Pero las calefaccíones de gasoil de las últimas décadas acabaron arrinconando este sistema de calefacción tan económico y sostenible. Aunque los que hemos sarmentado -sí, recoger los sarmientos a mano haciendo una gabilla- en frías mañanas de escarcha sabemos que no se trata de un falso lirismo evocador del pasado, sino de dejar constancia de otras formas de vida que parecían ya tan lejanas.


viernes, 3 de agosto de 2012

El libro de matrícula de El Toboso

Libro de matrícula de El Toboso de 1796

Entre las numerosas fuentes documentales para conocer los distintos aspectos de la población en la época moderna, contamos con los llamados “Libros de matrícula” –seguimos la tesis doctoral de José Camacho Cabello, La población del arzobispado de Toledo en los Tiempos Modernos.

Según se establece en las Constituciones Sinodales de 1660 (Libro V, Til IX, Const. 1):
‘Mandamos (…) que habiendo llegado a la edad de discreción se confiesen al menos una vez en el año y reciban el Santísimo Sacramento de la Eucaristía en sus parroquias (…) desde el domingo de Ramos basta el domingo después de Pascua de Resurrección inclusive’. Se indicaban severas penas para los que no cumpliesen y para hacerlo con todo rigor ‘ordenamos que de aquí adelante, los curas por sus personas sin comentarlo a sus tenientes ni sacristanes tengan cargo en cada u año de hacer la matrícula cada uno en su parroquia de todos sus parroquianos, así casados como no casados, así varones como mujeres, designándolos por sus nombres y edades poco más o menos”.

Los curas siguieron este precepto y en muchos archivos parroquiales se conserva esta valiosa fuente documental, como por ejemplo en el Archivo Parroquial de El Toboso. Aparece un listado de familias –en este caso no aparece la calle en la que vivían- que habían cumplido estas obligaciones eclesiásticas. Se señala si ha habido comunión –cm- o confesión –cfn-. Los párvulos, evidentemente no aparecen en los listados. Los curas enviaban estos listados –o unas copias- al arzobispado. Cuando esta matrícula incluye a todos los adultos del municipio se convierte en el censo más fidedigno para el siglo XVIII. Al mismo tiempo, estos Libros de Matrícula representan de forma clara que ell control social de la Iglesia era absoluto en el Antiguo Régimen.

La persecución inquisitorial de la familia Alonso-Villanueva de El Toboso

 El Archivo Diocesano de Cuenca contiene un conjunto de expedientes inquisitoriales referidos a El Toboso de inestimable valor para conocer ...