En 1525, cuando El Toboso tenía unos 300 vecinos (unos 1200 habitantes) había varias ermitas diseminadas por el término municipal. En 1526 estaban reedificándose dos de la cuatro ermitas de la localidad -San Benito, Ntra Sra. De los Remedios-, y poco tiempo después se emprendió la construcción de la ermita de San Pedro –situada cerca del Pozo de los Moros, que en estos momentos estaba en ruinas-. Todas se remataron con armaduras de madera (A.H.N., OO. MM, libros 1080-C y 1084-4). Tuvieron cubierta con armadura de parhilera las ermitas de Ntra. Sra. de los Remedios, San Benito, Santa Ana y Santa Catalina.
Pasados los siglos, cuando apenas quedaban ruinas de las ermitas anteriores, en 1893 se construyó - por iniciativa de Jacinto Fernández Rodríguez y Nieto, por el maestro Eulogio García Romeral y Pozo, ambos vecinos de Quintanar de la Orden- otra ermita de San Pedro - peritada y recepcionada por el maestro alarife de El Toboso León Gómez Gallego y siendo alcalde constitucional Antonio Nuño de la Rosa Iniesta-, con ubicación en la Venta de El Toboso, que actualmente también se encuentra en estado de ruina y abandono.
Restos de la ermita de Santa Ana. Foto de José Angel Gómez Gallego